El Premio Edelstam 2022 se concede a la Sra. Norma Esther Andrade por sus destacadas contribuciones y su coraje excepcional al defender sus convicciones en la Defensa de los Derechos Humanos. El premio se entregará durante una ceremonia en la Casa de la Nobleza en Estocolmo, Suecia, el 22 de noviembre de 2022.
La Sra. Norma Esther Andrade, de Ciudad Juárez, México, ha dedicado su vida a luchar por la justicia de las mujeres en todo México, desde que su hija de 17 años fue secuestrada, desaparecida y brutalmente asesinada en 2001. Desde entonces, Norma ha defendido incansablemente los derechos de las mujeres y, a pesar de las numerosas amenazas de muerte recibidas, sigue siendo una llama de esperanza para mujeres que luchan por los derechos humanos en todo el mundo. Ha jugado un papel fundamental en el reconocimiento del feminicidio como una nueva figura delictiva en el código penal mexicano.
Feminicidio: asesinato de mujeres o niñas solo porque son mujeres
Feminicidio, asesinato de mujeres por el simple hecho de ser mujer; delitos que no se investigan debidamente y muchas veces quedan en la impunidad. La Sra. Norma Andrade lucha por lograr justicia, no solo en el caso de su hija, sino también en los de muchas otras mujeres desaparecidas en México. Al presionar al gobierno mexicano para que luche contra la impunidad, resuelva los asesinatos y contrarreste la prevalencia de los feminicidios, ha creado conciencia y avanzado la legislación sobre los feminicidios en México.
El trabajo de la Sra. Norma Andrade pone en gran riesgo su vida. Le han aconsejado que se vaya de México por su seguridad, pero como deseaba quedarse, ahora vive bajo protección policial las 24 horas del día.
“La actividad valiente de la señora Norma Andrade ha contribuido en gran medida a ayudar a muchas madres a plantear sus casos legales y ha contribuido a cambiar la legislación sobre feminicidios en México. La Corte Interamericana en 2009 dictaminó que los asesinatos de mujeres constituían una violación del derecho a la vida, la integridad y la libertad personal, y que el gobierno mexicano había violado el derecho de los familiares de las víctimas a acceder a la justicia y a obtener protección judicial. Aun así, no hay una implementación y aplicación adecuada de las leyes en México, y la Sra. Andrade todavía está esperando una fecha para el juicio del caso de su hija”, dice Caroline Edelstam, Presidenta del Jurado del Premio Edelstam y cofundadora de la Fundación Edelstam.
Impunidad: mirar al monstruo a los ojos y sostenerle la mirada
En México, mujeres y niñas temen a diario la violencia de género, ya que aún prevalece la impunidad. Hasta 1993, más de 400 mujeres habían desaparecido en Ciudad Juárez, y la organización “Nuestras hijas de Regreso a Casa” fundada por la Sra. Norma Andrade, vio que su misión era instar al gobierno mexicano a luchar contra la impunidad y rectificar la prevalencia del feminicidio. Aproximadamente el 98% de los crímenes quedan sin resolver, según el informe de 2018 de la Relatora Especial sobre Defensores de Derechos Humanos. Según un artículo en The Guardian del 26 de abril de 2022, México registró el año pasado 1.015 casos de feminicidio, en comparación con 977 en 2020. En total, unas 3.500 mujeres han sido asesinadas.
La Sra. Norma Esther Andrade ha defendido los derechos de las mujeres en plataformas como marchas, foros y eventos públicos, tanto en México como en el extranjero. En México, ella ha sido una de las voces más elocuentes y persistentes contra el feminicidio: el asesinato de mujeres simplemente porque son mujeres. Hoy, los feminicidios están tipificados en el Código Penal Federal mexicano.
“La Sra. Norma Andrade representa la voz de las muchas víctimas femeninas sin voz cuyos casos nunca han sido resueltos. La justicia debe prevalecer; la impunidad sistemática en México y el hecho de que algunos estados aún no distingan el feminicidio como delito distinto y separado del homicidio es altamente alarmante, dice Caroline Edelstam.
Motivación: El Jurado del Premio Edelstam
El Jurado del Premio Edelstam ha decidido otorgar a la Sra. Norma Esther Andrade el Premio Edelstam por los siguientes motivos: Norma Esther Andrade es una defensora de los derechos humanos que ha dedicado su vida, asumiendo graves riesgos y numerosas amenazas contra su vida, a luchar por el derecho a la justicia de las mujeres, en Ciudad Juárez, Chihuahua, y en todo México, jugando un papel decisivo en el reconocimiento del feminicidio en el código penal mexicano como una nueva categoría de delito: el asesinato de mujeres por el simple hecho de ser mujeres.
Las mujeres y las niñas temen cada día la violencia de género, ya que en México sigue prevaleciendo la impunidad, y cerca del 98 por ciento de los crímenes siguen sin resolverse, según el Informe Especial sobre Defensores de Derechos Humanos 2018. En 2009, la Corte Interamericana dictaminó en el caso del Campo algodonero que los asesinatos de las mujeres constituían una vulneración del derecho a la vida, la integridad y la libertad personal y que el gobierno mexicano también había violado el derecho de las familias de las víctimas a acceder a la justicia y a la protección judicial.
Norma Esther llevaba una vida normal hasta que su hija de 17 años desapareció y fue encontrada brutalmente asesinada en 2001, lo que cambió por completo la vida de la Sra. Andrade al negársele su derecho humano fundamental a la justicia. Ella representa la voz de los sin voz, de las víctimas a las que nunca se les da la oportunidad de ser escuchadas. Ella ha continuado valiente e incansablemente, más allá del caso de su hija, luchando por la justicia para las víctimas invisibles de los feminicidios, crímenes que nunca se investigan adecuadamente y que permanecen en su mayoría impunes en México. Ha seguido trabajando a pesar de las repetidas amenazas contra su vida, y de su desplazamiento forzado de Juárez. El trabajo de Norma Andrade ayudó a muchas madres de hijas perdidas a plantear sus casos legales en busca de justicia y por el estado de derecho, pero también a presionar a las instituciones mexicanas para que protejan mejor a las mujeres.
A través de su incansable trabajo con Nuestras hijas de Regreso a Casa, defendiendo el derecho de toda madre a obtener justicia, ha conseguido movilizar esas fuerzas de concienciación a nivel nacional e internacional sobre los feminicidios y los derechos de las mujeres en México. Tras el asesinato de su hija, la Sra. Norma Andrade se sintió obligada a convertirse en activista, y posteriormente tuvo que abandonar su ciudad natal hacia un lugar no revelado, viviendo ahora bajo protección policial permanente, por haber defendido valiente y persistentemente el derecho a la justicia.
El Premio Edelstam
El Premio Edelstam, establecido en Suecia, es una recompensa con contenido económico, administrada por la Fundación Harald Edelstam. El Premio Edelstam se otorga por contribuciones importantes y coraje excepcional en la defensa de las propias convicciones a favor de la defensa de los Derechos Humanos.
El Premio Edelstam recibe su nombre, y es concedido en memoria del Diplomático y Embajador Sueco Harald Edelstam (1913-1989). Harald Edelstam se distinguió como diplomático por su competencia profesional, su valor y su coraje civil, en la lucha por los derechos humanos. Sus acciones memorables en casos específicos contribuyeron a salvar más de mil vidas en peligro.
El ganador del Premio Edelstam puede ser un particular, o una persona que ocupa un puesto en un Gobierno, o en organizaciones nacionales o internacionales. Debe ser una persona que haya actuado en el espíritu del Embajador Harald Edelstam en un país o países en los que los derechos humanos, de acuerdo con el derecho internacional, hayan sido violados. El galardonado debe haber mostrado capacidades excepcionales en el análisis y manejo de situaciones complejas y en encontrar formas creativas, incluso fuera de lo convencional, para defender los derechos humanos. Es de esperar que el candidato haya sido capaz de adoptar un papel decisivo en una situación compleja para ayudar a personas amenazadas, o directamente, de haber salvado vidas humanas. El coraje civil es una condición fundamental para la selección del candidato.
El Jurado
El Jurado Internacional está presidido por Caroline Edelstam, la nieta de Harald Edelstam y co-fundadora de la Fundación Edelstam. Otros miembros del Jurado son la Jueza Shirin Ebadi, Premio Nobel de la Paz en 2003 representando a Asia; Africa esta representado por la Dra. Fatou Bensouda, ex Fiscal Jefa de la Corte Penal Internacional (CPI) y el Dr. Pascoal Mocumbi, ex Primer Ministro de Mozambique (1994-2004). La Embajadora Eileen Donahoe, Directora Ejecutiva del Global Digital Policy Incubator en el Stanford University’s Center for Democracy, Development and the Rule of Law y ex- embajadora de Estados Unidos ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, representa al Norte de América. El Profesor Philip Alston, ex Relator Especial de la ONU sobre la extrema pobreza y derechos humanos, representa a Oceanía. Latinoamérica está representado por Magistrada Patricia Linares Prieto, exPresidenta de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP); y Europa está representada por el ex Juez Baltasar Garzón, anterior Juez Central de Instrucción de la Audiencia Nacional, defensor de derechos humanos, y conocido por haber procesado al dictador chileno, General Augusto Pinochet por la muerte y tortura de miles de víctimas de Chile y de otros países.
Para más información, por favor contacta:
Lise Bergh, vice-presidenta de la Fundación Harald Edelstam
Tel: +46 (0)707 57 48 58, correo electrónico: lise.bergh@edelstamprize.org
Pagina de web: www.edelstamprize.org / www.edelstam.org
